el Ejemplo de Demacia
El príncipe Jarvan, vástago de la dinastía Escudo de Luz, es heredero del trono de Demacia. Criado para ser un modelo de las virtudes más grandes de su nación, se ve forzado a balancear las grandes expectativas que se tienen de él y su propio deseo de pelear en el frente. Jarvan inspira a sus tropas con su temible valentía y desinteresada determinación, levantando alto los colores de su familia y revelando su verdadera fuerza como un líder futuro de su gente.